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jueves, 1 de agosto de 2019

Damián.


Damián:-

Hoy he atendido a una persona invidente, Damián.
Separado, arruinado, con el banco que se le echa encima, y me ha explicado su día a día, aunque mucho me temo que ha exagerado con su tema económico. 
Nada más levantarse, se va a desayunar con unos amigos, antes de que el sol caliente.
Después iba a su casa y hacía las cosas del hogar.
Limpiar, cocinar, poner la lavadora.
Veía tv, pero solo le gusta antena 3 y el canal 8, desconociendo su contenido.
Por la tarde aprovechaba para trabajar con el ordenador, leer libros de historia, hasta que llegaba la noche y se acostaba.
Su ilusión, potenciar su asociación gastronómica: "la buena vida".
Y he intentado encontrar respuestas a mi vida.
A esas siestas sin dormir.
A esas carreras que me pego por las tardes con ese calor.
A esos helados que me tomo en el bar de mi barrio.
A esas noches eternas, que parecen no acabar nunca.
A montar en moto, en agosto, con el calor que desprende mi motor.
Al insomnio, a los mosquitos, a no beber alcohol, a vapear, a cuidar mi alimentación.
Tenemos un paralelismo: vivir solo, mi asociación gastronómica “arroz con costra”, pero él tiene actividades caseras que llenan su tiempo libre, y yo tengo actividades de calle que llenan mi tiempo libre.
Su preocupación, no pasar la Navidad solo.
Mi preocupación, no pasar el otoño solo.
Un paralelismo pero con una gran diferencia.
Él es feliz en su casa y yo soy feliz en mi calle.
Él se siente solo en la calle, yo me siento solo en casa… :) 


2 comentarios:

  1. Cada uno tiene su realidad y sus ilusiones; cada uno busca sus estrategias para solventar el día a día. Todo llega...

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    1. Todo llega y todo es muy sencillo. Pero al final, todo llega. Un beso y gracias por leerme.

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