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lunes, 28 de octubre de 2019

Familias reestructuradas!!!

LA MADRASTRA

La segunda esposa de mi padre apareció un día con un kilo de caramelos y dos perros caniches. Mi hermana y yo la mirábamos aterrorizados, tanto nos habían hablado nuestros amigos de lo malas que resultaban las madrastras, que ni siquiera le dijimos gracias.

Ella lejos de ofenderse sonrió y nunca más dejó de hacerlo.
Era una mujer bella, de cara maternal y cabellos oscuros.
Mi padre nos la presentó y sin preámbulos nos dijo que sería nuestra nueva madre. Yo era muy chico como para entender lo incómoda que ella debió sentirse. El silencio fué nuestro recibimiento.

Se casaron por civil y casi de inmediato se mudó a nuestra casa.

La casa había estado sumida en la oscuridad propia del duelo, y nosotros ya nos habíamos habituado. Lo primero que hizo el día que llegó fué dejar entrar el sol. Y poner música.
Recuerdo la cara que puso mi hermana cuando escuchó la música y tuvo que cubrirse los ojos cuando el sol le dió de lleno en la cara. Incomprensión, fué lo que vi en ella.

Hizo una limpieza a fondo a todas las habitaciones, tan minuciosa y detallista, que un rey se hubiera sentido en casa. Llenó los estantes de libros, y cuando pasó frente al cuadro de mamá en la sala, yo pensé que lo quitaría, pero no lo hizo, se limitó a sacarle el polvo y centrarlo correctamente.

Ese día la acepté, y ese día cambió el rumbo de mi destino. Pero yo no podía saberlo.

La cocina era su fuerte, y se la pasaba siempre ocupada preparando platos extraños, llenando la mesa de delicias que ninguno de nosotros había probado. Así se ganó el corazón de mi padre, y mi hermana dejó su desconfianza y le habló.
Después de un año casi no recordábamos la terrible enfermedad de nuestra madre, aunque de ella sería imposible olvidarnos, su imágen seguía reinando en el salón.

Aunque le tomamos cariño nunca la llamamos mamá, pero ella tampoco lo exigió. Se ganó nuestra confianza y estuvo cada vez que necesitamos un consejo, y nos cubrió cuando nuestras travesuras nos ponían en evidencia frente a mi padre.

Así pasaron varios años, y un día papá no volvió del trabajo.
Mi segunda madre al principio no se preocupó, pero luego pasó largas horas al teléfono, preguntando por él a sus compañeros de trabajo. Hasta que se halló su auto, unos jóvenes montañistas lo encontraron entre las rocas. Había caído por el acantilado, dentro de él mi padre tuvo una muerte instantánea.

La segunda muerte de nuestra niñez, nos puso de frente a la realidad de la vida y es que nada es para siempre.
Después del entierro y con terribles presagios que no compartimos con nuestra madrastra, nos preparamos para terminar ambos en alguna institución de menores.
Pero ella no se fué, siguió siendo la misma que fué mientras vivió mi padre, o aún mejor.

Tomó un trabajo de medio tiempo como cocinera en un restaurante local, y trató de alivianar nuestra pena con todo lo que se le ocurrió. Inventaba paseos a cualquier hora, o ponía música y bailaba sola o con sus perros que saltaban a su alrededor contagiados por su alegría. Nosotros la observabamos sin participar, callados y tristes.

Pero ya debíamos conocerla, y nuestro mutismo no la avasalló. Redobló sus intentos y poco a poco fuimos cediendo.
Las pocas veces que le hablábamos era para preguntarle dónde estaba esto o aquello, pero nunca creímos necesario ser amables con ella.
Pero ese día amaneció soleado, después de varios meses de la muerte de papá al fin el cielo azul y limpio nos invitaba a salir.

Por eso le pregunté dónde estaba mi pelota de fútbol, y ella la buscó con una sonrisa gigante.
Me la dió y mientras me alejaba hacia la puerta me dijo.
_ Si no quieres jugar solo aqui estoy..-
_Bueno..- Dije yo levantando los hombros.
Salí al patio y jugué un rato contra el paredon que dividía nuestro terreno. Al fin me dí cuenta que mi hermana no jugaría conmigo y me animé a llamar a mi madrastra.
Ella estaba esperando al parecer, porque apareció sonriente seguida por sus caniches y empezó a tocar la pelota sin habilidad pero riendo como una niña.
Jugamos un buen rato y después me dijo que entraramos a comer algo.

Sus desayunos y meriendas eran espectaculares, aunque no tuviera mucho ella se las ingeniaba para darle color a la mesa, según ella eso es tan importante como la buena calidad de los productos a consumir.

Desde ese día nació en mi un sentimiento muy parecido al amor, la acepté como mi madre.
Y no tuve miedo de equivocarme.
Mi hermana vió el cambio en mi actitud, y aunque con más cautela comenzó a verla con otros ojos.
Así antes de terminar ese año, los dos sentíamos por ella un inmenso amor, aunque nunca se lo dijimos.
Pero además de buena cocinera y excelente ama de casa era muy inteligente, y lo notó.

Se dió cuenta de nuestro cambio y se sumó con una calidez y sinceridad que nos terminó de ganar.
Cuando terminé mis estudios no creía poder continuar en el nivel terciario ya que nuestros ingresos aunque nos sostenían, eran mis reducidos.
Pero ella había ahorrado durante esos años, y me inscribió en una universidad sin decírmelo.
El día que me enteré lloré de alegría, y mi hermana me abrazó emocionada.
Ella siguió estudiando en la ciudad y se perfeccionó como enfermera.
Me fuí con la sensación de estar en deuda para siempre, y más aún teniendo en cuenta que ella no era nuestra madre y que pudo irse y olvidarse de nosotros al morir mi padre. Pero no sólo no lo hizo, sino que se quedó y fué la madre que nunca imaginamos.
Años pasaron desde esos días, me recibí y comencé a ejercer como abogado, teniendo siempre contacto con mi hermana y mi segunda madre.
Al cumplir los treinta y tres ella enfermó, yo vivía a unos cuantos kilómetros pero me mudé para acompañarla.
Nos turnamos mi hermana y yo para asistirla, pero el informe médico no era alentador.
Se moría, y ella lo sabía.
Aunque más triste y sin fuerzas aún sonreía, y nos hizo prometer que no la llorariamos, prefería risas.
La enterramos un lunes, al principio del verano, no quiso que la pusieran junto a mi padre, dijo que ese lugar era de nuestra madre. Ella misma eligió un lugar discreto debajo de los árboles.
Vamos cada cierto tiempo a visitarlos, a los tres.
En la tumba de mamá siempre dejamos rosas rojas sus favoritas, en la de papá leemos el periódico, principalmente los chistes que era lo que más leía. Y en la tumba de nuestra madrastra, la última en nuestro recorrido ponemos caramelos. Ella así lo quiso.
Muchas veces las segundas oportunidades no son buenas.
Pero muy de vez en cuando, llegan a nuestras vidas personas increíbles que ocupan un lugar en nuestros corazones y no lo abandonan nunca más.
Aunque se hayan ido.

Autor desconocido


martes, 22 de octubre de 2019

Para que???

Para que???

A veces hay que preguntarse las cosas.

Para que de esta decepcion???
Para que de esta mala contestacion???
Para que esta actitud???

Y el "para que" siempre te da el motivo de esa decepcion, esa mala contestacion o esa mala actitud.

Muchas veces el "para que" es para decirde algo que has hecho mal, para que te desde cuenta, para recordarte, que todo es por algo y nada es por nada, para aprender.

En poco tiempo,me aprendido el porque de tres "para que" y aunque eso no me hace Feliz, me ayuda a aprender la leccion.

Asi que desde mi fabilidad e  imperfeccion he hecho este post.

El "ay"del "para que"??? Tan amargo y tan necesario.




lunes, 21 de octubre de 2019

Tatami.

Hoy me lo he pasado en grande en mi gimnasio.

Tras veintiun años sin entrenar, practico katas que recuerdo de cinturones superior es.

Me acuerdo de mucho. Los pasos, la forma, la tecnica... Pero no me acuerdo de todo y hoy entrenando a mi bola, se pone un cinturon superior a aprender mi kata... Como si yo fuera un sensei japones o yo que se.

Me he acordado de Forrest Gump... Cuando empieza a correr y mucha gente lo sigue y bueno... Base, fondo, tecnica... Como que si, pero katas de cinturones superiores... Dentro de unos meses, pero ahora no.

Asi que ahi estaba yo... Con mi karategui recien "lavado" y creando escuela... Jj.

En fin... :)





Pepe.

Ayer comi con la amiga de mi amiga, Juana.

En el postre nos hablo con lagrimas en los ojos de Pepe, su esposo.

Empezo a salir con el a los quince años y Pepe se "marcho" hace año y medio.

Nos hablaba de el, de lo mucho que le cuesta levantarse todos los dias y en como se refugiaba en sus amigas y actividades.

Nos dio el secreto de las grandes relaciones... La admiracion.

Si admiras a tu pareja, da igual que sea alto o bajo, gordo o flaco, calvo o peludo, para ti es el mejor.

El respeto, la union y el apoyo... Ingredientes necesarios para toda gran relacion.

Asi que este post es para Pepe, que supo enamorar y mantener su amor, aun en su ausencia.




sábado, 19 de octubre de 2019

Perdido.

Perdido.

Hoy he salido con dieciocho motos y me he perdido.

Se han juntado dos grupos de motos y en un cruce, que girado con el grupo equivocado.

Lo primero, mandar un wasap a mi grupo para saber que me encuentro bien.

Lo segundo, localizada un bar y desayunad tranquilamente.

Medio bocadillo de tortilla, un Aquarius y un descafeinado.

Y me encuentro genial, vapeando y disfruta do del Sol de otoño.

Ahora voy a buscar al grupo pero, voy a seguir vapeando un rating mas, disfruta do de mi compañia, con mi moto de fondo.

Perdido o encontrado??? No lo se, pero ser tu mejor amigo, es fantastico.

X

miércoles, 16 de octubre de 2019

La Belleza de una mujer.

Cuando le pidieron que revelara sus secretos de belleza, la actriz Audrey Hepburn escribió estas palabras:

"Para tener labios atractivos, pronuncia palabras de bondad.
Para tener hermosos ojos, mira lo que la gente tiene de hermoso en ellos.
Para mantenerse delgada, comparte tus comidas con los que tienen hambre.
Para tener un buen cabello, deja que un niño pase su mano todos los días.
Para tener un buen mantenimiento, camina sabiendo que nunca estás sola, porque los que te aman y te han amado te acompañan.
Las personas, más que los objetos, necesitan ser reparadas, mimadas, alegradas y salvadas: nunca rechacen a nadie.
Piensa en ello: si algún día necesitas una mano de apoyo, encontrarás una al final de cada uno de tus brazos.
Al envejecer, te darás cuenta de que tienes dos manos, una para ayudarte a ti mismo, la otra para ayudar a los que lo necesitan.
La belleza de una mujer no está en la ropa que lleva, su cara o su manera de arreglar su cabello. La belleza de una mujer se ve en sus ojos, porque es la puerta abierta en su corazón, la fuente de su amor.
la belleza de una mujer no está en su maquillaje, sino en la verdadera belleza de su alma. Esta es la ternura que da, el amor, la pasión que expresa.
La belleza de una mujer se desarrolla con los años.


martes, 15 de octubre de 2019

Cincuenta.



Hoy he hecho un ejercicio de Meditación y hablaba sobre el cambio.

Me ha preguntado cómo era mi vida hace dos años, en octubre de 2017.

En octubre de 2017 estaba recuperándome de mi accidente de moto, yendo al traumatólogo de Sanitas, pasando dieciséis horas en casa, con la decepción de que mi hermano no viniera a verme, con la ilusión de que mi sobrino viniera a verme, haciéndome la compra en Mercadona Online y pasando demasiado tiempo solo en casa.

A fecha de hoy, octubre de 2019, mi rodilla está perfecta, la relación con mi hermano ha mejorado, la moto que se me cayó está vendida, mi relación con mi cuñado y su esposa ha mejorado enormemente y ha pasado de ser tremendamente distante a ser mucho más cercana, estoy más unido a mi amigo Alberto, sentí la decepción de unos pocos moteros, a los que consideraba mis amigos, pero he encontrado a Rosa y a su familia, mi Tia Marisa y mi prima, Pepi, que son mejores que los moteros, más cercanos, más leales.

A los "amigos" Que les he pedido ayuda, no me han ayudado, pero tengo nuevos amigos que sin tener porque, me han ayudado, Como Roberto, Como Jose Manuel. 

En estos dos años, dos relaciones caóticas donde lo di todo, y donde me tuve que distanciar para dejar de sufrir.

Mi curso de escritura creativa junto a Eva Torres, mi gimnasio en Elche, mis paseos con la llana por el monte, mis fotos, mi blog, la compañía de mi amigo Roberto, las redes sociales, los wasaps, las burbujitas del msger, la Meditación, volver a correr, cosas nuevas que me ha traído los cambios.

Ver a mi madre ingresada en el hospital en dos ocasiones en seis semanas, pensando que era muy mayor, y como ahora la tengo en casa, jugando a las cartas, haciendo sopas de letras y viendo pasapalabra.

Ver como mi coche era pasto del Dana e ir muy feliz en mi nuevo coche escuchando los videos de YouTube.

El cambio, sufrimiento, ansiedad (movimiento), adaptación… y la tan anhelada serenidad.

Cuatro miedos plenamente identificados y en mi opinión justificados, y cuatro miedos desmontados y en mi opinión, muy objetivamente desmontados a mis espaldas, en cinco meses.

Pero a fecha de hoy, con cincuenta años, me esfuerzo para que todos los días me pasen cosas buenas.

Acepto el cambio, sus incertidumbres y los regalos que te trae.

Así que, bienvenidos… cincuenta. Confío en vosotros y en esta nueva etapa de mi Vida. 


lunes, 14 de octubre de 2019

La queja!!!



Desde un tiempo para acá, odio los bares y las conversaciones con extraños en los bares.

Casi todos los días tengo a Miguel contándome cosas raras a las 7am y hoy, una extraña me ha contado que anoche tuvo a su hija enferma, que hoy iba a hacer mucho calor, que cuesta mucho aparcar en Alicante y que hoy había venido a una plaza de profesora de designación difícil o algo así.

Luego mi compañera, de cuatro días en Sevilla, me ha contado no se que movida con su perro guía y bueno, creo que la gente no se dá cuenta de que, detrás de tu sonrisa y tu silencio, tb tienes tu batalla.

No me gusta la gente pesimista pero si es un amigo, aquí estoy yo para lo que haga falta, que cuente conmigo, así que diré que no me gusta la gente pesimista que habla con extraños de sus problemas a las 7am en los bares, para ser más preciso.

Quizás estaría bien contestarles que llevo seis meses durmiendo mal y que aunque estoy infinitamente mejor, a veces tengo ansiedad y me esfuerzo en ocupar mi mente en la calle, con actividades, con el wasap, con el msger o simplemente, haciendo cosas en casa del tipo limpiar o hacer de comer.

Cuando la queja es gratuíta y es un estilo de vida lo mejor es… huir.

La queja no ayuda en nada. Ni al que se queja lo ayuda ni al que escucha enriquece.

No me gusta la gente que se queja por sistema, del calor del verano, del frío del invierno, del trato en el bar, de las retenciones en la autovía, del aparcamiento… ya que todos sufrimos calor, frío, desaires en los bares, retenciones en la autovia y problemas de aparcamiento, pero cada uno lo gestionamos de manera distinta, así que, sin ser la persona más positiva que conozco, hace tiempo que dejé de quejarme ya que, no me ayuda, en nada!!!














viernes, 11 de octubre de 2019

Serenidad!!!

Pues nada, la ansiedad paso y he sido capaz de desmontar mis cuatro miedos. 

Mi familia me quiere de una forma de una forma distinta a como yo la quiero, pero en caso necesario, me auxiliara. 
Me lo dijo Alberto pero tuve que verlo yo. 

Mis amigos son más íntimos y cercanos y en caso necesario, me ayudarán. 
Hay que ser proactivo. Solo así tienes actividades los fines de semana. 
Roberto, Alberto, Rosa y su familia, Marisa Recio, Eva, Juani, Lidón... Cuantos quisieran. 

La soledad. Por pasar tres horas al día solo, no voy a organizar un drama. 
Ceno, veo tv y me acuesto con el gato. 
Txema me enseño a tener actividades en casa, limpiando y cocinando. 

Soy un tío sano e independiente. No voy a pensar que pasará cuando enferme. 
Solo puedo hacer, lo que esté en mi mano. 

Y sobre la posibilidad de volver a tener pareja, hay más peces en el río. 
Solo es cuestión de tiempo y de saber elegir, que las cargas familiares y la precariedad económica me las conozco. 

Así que vuelvo a ser lo que era. Con mi trabajo, mejores amigos, actividades y mi familia. 
Vuelvo a tener tres patas de mi taburete y no me caigo. 

Me lo dijo Esther. Lo que te propones lo consigues y he conseguido volver a tener cierta serenidad. 

Ahora... A por la total serenidad.

 

domingo, 6 de octubre de 2019

Juani.

Hoy he llamado a mi amiga Juani.

Hemos hablado de Dana, goteras, coches y de mi ansiedad. 

Le he contado mi relación de Ciudad Real, lo del ingresos de mi madre, que pensé que se iba, y de mi ansiedad.

Le he dicho que estaba en tratamiento médico y que no se preocupara, que ya había pasado el tsunami y que estaba mejor.

Tb le he contado lo del accidente en moto de hace dos años y bueno, se ha puesto a sufrir, señal de que me quiere.

Que debi haberla llamado antes y habérselo contado todo, pero no me di cuenta, así que se lo he contado hoy.

Porque necesito su dulzura, su apoyo, sus llamadas, sus pensamientos, su risa, sus historias con su trabajo, familia y porque siempre me ha mostrado su amistad.

Y hoy. He necesitado contárselo.
Y hoy. La he vuelto a encontrar.




jueves, 3 de octubre de 2019

Aprovechar el momento.

Aprovechar el momento.

No hay mal que por bien no venga.

Quería regalarme un coche por mi cincuenta cumpleaños, pero no veía el momento.

Quería hacer las paces con mi cuñado, después de diecisiete años de silencio, pero no veía el momento.

Con las fuertes lluvias de Dana, pierdo mi coche y mi cuñado se ofrece a prestarme el suyo por tiempo indefinido... Y aprovechó el momento.

Ahora tengo un coche nuevo y sobre todo, he recuperado a esa persona que tanto he echado de menos, que tanto me ha ayudado y me siento, contento.

He sabido... Aprovechar el momento, así que Antonio, bienvenido a mi vida.

Te he echado de menos.