Hace como una década, cuando pesaba 95kgs y fumaba paquete y medio de tabaco, tuve un sueño.
Iba corriendo, dando zancadas, tipo muelle, muy ligeras y briosas.
Fue un sueño precioso y un despertar nostálgico.
Este mes de junio, con bastante kgs menos y sin fumar, he empezado a correr.
No son las zancadas briosas y ligeras de mi sueño, pero son zancadas, y son exponenciales.
Es la tercera vez que corro en este mes.
Un minuto corriendo, dos recuperando, así hasta cuarenta minutos y me parece mentira que vuelva a correr.
Me acuerdo en la epoca universitaria los lunes y miércoles como corría por el estadio del Rico Pérez en Alicante.
Días de viento o de frío... a las ocho me iba a correr.
Veinticinco minutos, diez vueltas a la pista y como ahora, veinticinco años después, uno de mis muchos sueños, se va cumpliendo... poco a poco, sin exigencias, sin plazos.
Volver... a correr.
Enhorabuena, Roberto. Querer es poder.
ResponderEliminarHoy 30 minutos en Guardamar. Una pasada!!!. Un abrazo y gracias por tu comentario.
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