Abrí
los ojos en mitad de la noche recordándole; hacía años que desapareció de mis
pensamientos. Nunca había sido buen estudiante y la lectura nunca fue su
fuerte, le avergonzaba leer.
Un día me acompañó a la
biblioteca y elegimos un libro para leer en la cama; Moby Dick, el más grueso que vio en el estante.
"Así te tendré en
la cama más tiempo".
Terminé comprando el libro.
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-Historia con la que coloaboramos
y que forma parte del libro
UNIVERSO DE LIBROS-
Qué bueno!
ResponderEliminarCon poquito dice mucho!
Me ha gustado Nieves.
Besos =)))
Muy bonito, Nieves.
ResponderEliminarBesos
Todo un mensaje de amor, un abrazo Nieves!
ResponderEliminarMejor haber comprado "En busca del tiempo perdido".... dura mucho más.
ResponderEliminarEso es que el que no le gusta el café y se pide taza y media en vez de ir probándolo poco a poco. Claro que a él lo que menos le importaba era cogerle gusto al café.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias por vuestros comentarios.
ResponderEliminarEstá claro que para él lo importante siempre fue tenerla a ella en su cama, el libro siempre fue lo de menos.
Ella era la apacionada de los libro y la que nunca podrá olvidar el comienzo de esa gran historia... "Llamádme Ismael. Hace unos años-no importa cuánto hace exactamente-, teniendo poco o ningún dinero en el bolsillo, y nada en particular que me interesara en tierra, pensé que me iría a navegar un poco por ahí, para ver la parte acuática del mundo"
Y es que para esta apacionada literata todas sus mejores historias comenzaron con un libro. Estoy segura. :)
Besos a tod@s
Entre la lectura y el sentimiento,(el mejor motivo) estoy segura de que ambos en algún momento exclamaron: -¡Qué libro y qué cama! Benditos reencuentros!-
ResponderEliminarMuy bueno. Felicidades y un cordial abrazo.
Amor y lectura.El texto hermoso.Siempre habrá quién se conmueva o persuada con el relato tuyo, para la lectura. Melville, siempre estará, ahí con sus libros de barcos y mares.UN beso. Carlos
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